The One.

0 comentarios
When stars collide like you and I
No shadows block the sun


Mientras sigas dejando que hunda mi nariz en tu cuello,
no hay forma de que este hechizo de feromonas se deshaga.
Mientras tu sabor a mujer siga adosado a mis papilas,
no hay manera de que mis pasos se aparten este camino.

Mientras que la suavidad de tu piel sea palpable para mí,
no hay indicios de que mi saludable adoración por vos, se disipe.
Mientras tus palabras sigan siendo disparadores de verdades,
no hay por qué temer a la sinceridad que se manifieste.
Mientras tu risa y tu exquisita forma de provocar la mía, persista,
no hay dudas que elegiré seguir gozando tu dicha.

Mientras haya luz que me guíe y sol que me entibie,
no habrá obstáculos para continuar esta senda.
Mientras ningún planeta colapse contra nosotros,
estaremos a salvo y libres de decidir nuestros pasos.

Lascivia.

0 comentarios

Provocame. Haceme que me incendie. Que me consuma por dentro sin siquiera llegar a rozarte. Disparame esos dardos precisos que liberan su veneno en mi torrente sanguíneo y me dejan a tiro de nockout.
Siempre supe que tu destreza era difícil de equiparar. Asumir el juego del vale todo me resulta imposible de rechazar. Sos mi más digna contendiente. Ahora las cosas comienzan a ser un poco más retorcidas de lo que lo han sido hasta ahora. Y me gusta. Porque me gustás, así de perversa y angelical. Así de simple, así de mortífera.

¿Supusiste que mi juego era distinto? No te creo. Siempre intuías hacia dónde se perfilaba mi lascivia. Hoy te dejo dos cuerpos de ventaja (de esos que se cruzan entre las piernas hasta acabar gimiendo). Ya me los voy a cobrar, a su debido tiempo.

Ahí estás. Justo leyendo estas líneas por tu dispositivo favorito. Y yo te pienso. Acerca de cómo voy a hacer para devolverte cada minúsculo poro que se eriza en mi piel cuando tus letales palabras se agolpan en mis oídos. Tomalo como una ofrenda, respiralos como vos bien sabés hacerlo.

 

Cédula.

0 comentarios

Cumplo en notificarte, si es que la comunicación no verbal no te ha sido suficientemente contundente, que estás sentenciada a ser la que motorice mis pasiones, mis deseos y las fantasías más diversas que tu extenso prontuario pueda impulsar.
No pienso esconderme bajo la piel de cordero que, supuestamente se me atribuye, a instancias de un clásico contendiente. Así es que, si en ejercicio de mi lascivia te encontrás a tiro de diana, dejáte impactar. No hay escapatoria. O son mis flechas o son mis garras. Si escojés la vía más lenta, no voy a titubear es desgarrar tu piel hasta que gimas de placer... Tu opción será pedir clemencia para que el ardor de tus heridas sean solamente aliviadas por la brisa que te propicie mi boca (sí, aún persiste en ser condescendiente con tu orografía).


Aún cuando tus temblores o la electricidad de tus sinapsis descontroladas no permitan relajar tus músculos, voy a insistir en arrastrárte aún más con mi lengua por los canales que describe tu mejor ofrenda. Y sabés que mi adoración por todos tus labios es completa.
Nada más que esta cédula de notificación para que estés al corriente. Y que imagines tu merecido.

Será justicia.

En mis brazos.

0 comentarios
For many times I've tried, love has never felt as good.


Tu suave respiración me decía que dormías plácidamente mientras tu delicado rostro se ajustaba con precisión en el ángulo que formaba mi pecho y mi cuello. Sin más traje que nuestra piel, tus brazos se afincaban en los míos y, sueltos, completaban el recorrido entre dos cuerpos que, por siglos, buscaron ser uno mismo.

La madrugaba entraba en su fase más profunda así como tu sueño se dispersaba por los dominios de Morfeo. Me resistí a alejarme de esa fascinante contemplación de tu humanidad en armonía, al menos por un par de horas. Mis ojos se negaban a abandonar esa escena de confortable familiariedad. Esa misma sensación que tuve en el preciso instante en que fundimos el primer abrazo y rozamos nuestras manos.

Mucho tiempo es decir poco a la hora de imaginar los siglos en los que deambulé por lugares sin poder encontrarte. Y ahora que estás a mi lado, agradezco la preciosa causalidad del destino que nos cruzó al paso, ofrendándonos esta oportunidad, quizás única, de ser, al menos por hoy, un sólo cuerpo.

You make it easy by Air on Grooveshark

Puente.

0 comentarios


Hoy te busqué en la rima que duerme con todas las palabras...

Nos cruzamos en el momento justo de nuestras vidas en las que lo nuestro podía tener existencia real. Así es como siempre me lo has planteado y así es como lo acepté. Reafirmo que lo acepté porque si te hubiera conocido en cualquier otro momento, hubiera sentido el mismo impacto que sentí al cruzarte en mi camino.
Es cierto que quizás vos no hubieras estado dispuesta a embarcarte en la aventura de un gran amor, del verdadero amor. Pero, ¿acaso hoy las cosas no resultan profundamente complejas y oscuras como para pensar que este presente pueda afirmarse con fuerza sin nuestra aprobación?

Si algo callé es porque entendí todo, menos la distancia...

A cada instante de nuestras vidas tuvimos la libertad de optar y elegir qué era lo que queríamos para nosotros. Y este momento no escapa a esa premisa. Somos libres de ponderar nuestra alquimia y exorcizar el pasado que se mantiene aferrado sobre los supuestos de una ficción que no fue ni lo será. Lo más doloroso de todo es que lo sabés y aún así conjeturas acerca de tus culpas e inacciones que bien pudieran haber torcido ese instante de disociación en el que hoy te encontrás. Duele verte inmersa en tus castigos mentales que han transcendido las elucubraciones para pasar a ser motivo de insomnios o malestares físicos manifiestos.

Cruza al amor. Yo cruzare los dedos...

Hace bastante que ese puente está presente entre nosotros y se ha mantenido firme a pesar de los embates que han sufrido sus cimientos. Podés cruzarlo todas las veces que vos tengas ganas. Sabés que de este lado siempre te esperaré con los brazos abiertos, sin importar nada más que saberte dueña de mi corazón y mi todo. Animarte a ser feliz no puede ser motivo de angustia o hacerte presa de los miedos más diversos.

Ya estas aquí. Y el paso que dimos es causa y es efecto. 

De este lado del universo, hay una historia que se escribe en presente. Un precioso instante que sólo presagia buenaventura. Es intuición, es percepción felina y por supuesto, mi deseo más ardiente de concretarlo para colmarte de felicidad y entrega, gracias a un amor que jamás había experimentado antes.



Usa al amor... Usa al amor como un puente.